¿Wíinik una Ludoteca?

Somos una
Ludoteca  Itinerante

La actividad esencial de los niños está sustentada en el juego, de esa forma desarrollan gran parte de su personalidad. Jugando los niños toman conciencia de lo real, se implican en la acción, elaboran razonamientos y juicios.

Se ha definido el juego como un “proceso sugestivo y substitutivo de adaptación y dominio”, y de ahí su valor como instrumento de aprendizaje.

Marginar el juego de la educación equivaldría a privarla de uno de sus instrumentos más eficaces, por ello el educador debe asegurar que la actividad del niño o la niña sea una de las fuentes principales de sus aprendizaje y desarrollo, pues a través de la acción y la experimentación, ellos expresan sus intereses y motivaciones y descubren las propiedades de los objetos, relaciones, etc.

Partiendo de la idea de que el niño crece, se desarrolla y aprende en interacción con el entorno, las excursiones escolares tienen sentido en el momento que las consideramos un recurso rico en estímulos, donde los niños pueden experimentar, vivir situaciones y aprender en ellas, con ellas y de ellas. Estas vivencias tan significativas para ellos, les estimulan y les ayudan a comprender cada vez mejor el medio que les rodea.

Las condiciones actuales de inseguridad y economía, no permiten que las escuelas realicen de forma continua,  esta valiosa actividad.

Observando esta situación, surge el Proyecto Wíinik® si las escuelas se ven limitadas o imposibilitadas de visitar lugares de aprendizaje  y entretenimiento, ¿porqué no llevar el aprendizaje y diversión a las escuelas?

Somos una Ludoteca Itinerante que ofrecemos un espacio recreativo-culturales especialmente pensadas para los niños, con la  misión de desarrollar la personalidad de éstos mediante el juego, ofreciendo los materiales necesarios (juguetes, material lúdico y juegos), así como orientaciones, ayudas y compañía que requieren para el juego donde:

• Se posibilite a los niños y las niñas el acceso al juego en todas sus dimensiones.
• Se facilite que el juego sea una actividad lúdica que favorezca el desarrollo psicomotor, afectivo y social del niño.
• Se cree un espacio de juego que se adecue a las necesidades, características y cultura de los niños y niñas de nuestro contexto.
• Se eduque  para el ocio, la recreación y el tiempo libre
• Se contribuya a la protección y garantía de los derechos de los niños y las niñas
• Se promuevan pautas de educación y crianza no violenta a través de procesos lúdicos pedagógicos en las escuelas y  las familias.